La cruz cristiana es considerada como el símbolo principal de la religión cristiana. La cruz es un símbolo del instrumento de la crucifixión de Jesucristo. En el cristianismo, un crucifijo es una cruz con una representación tridimensional del cuerpo de Cristo. Las dos formas más comunes de cruces presentes en la religión cristiana son la cruz griega y la cruz latina.

La cruz más conocida es la cruz latina, que para los cristianos representa la cruz de la crucifixión de Cristo. Cuando se muestra con la imagen de Cristo, se le llama crucifijo. La forma de una verdadera cruz latina, cuando está plegada, crea un cubo, un antiguo símbolo de la autoridad terrenal.

La cruz del cristianismo fue un símbolo posterior de la fe, reemplazando el cordero, el pescado, el alfa/omega y el fénix como emblemas. Anteriormente se consideraba un símbolo pagano, con varios padres de la iglesia primitiva que se oponían a su uso.

Por otro lado, la cruz cristiana original, hoy llamada cruz griega, tiene la forma de una X. La cruz griega era una abreviatura del nombre “Cristo”, no una representación de la cruz de la crucifixión. El monograma Chi-Ro de Constantino está estrechamente relacionado con este símbolo. La cruz latina se puso más a favor más tarde, cuando la madre de Constantina, la emperatriz Elena, afirmó haber descubierto la “verdadera cruz” de la crucifixión, el comienzo de un comercio interminable de “reliquias” santas.

La cruz pre-cristiana

Un vasto cuerpo de evidencia muestra que la cruz fue utilizada siglos antes del nacimiento del cristianismo. Se cree que la cruz se originó en los antiguos babilonios antes de que se extendiera a otras partes del mundo, como Siria, Egipto, Grecia, América, India y México. La cruz pre-cristiana se usó como símbolo religioso y como adorno entre los egipcios, sirios, griegos, persas, europeos y en algunas partes de África. Había, por lo tanto, uso universal de la cruz pre-cristiana. En muchos casos, su uso estaba usualmente relacionado con alguna forma de adoración. La cruz pre-cristiana existía en dos formas; La cruz tau y la cruz svastika o fylfot. 

Historia de la cruz cristiana

La cruz cristiana como símbolo cristiano tiene sus raíces en el paganismo antiguo. El uso de la cruz cristiana como símbolo cristiano comenzó después de la época del Constantino, que ocurrió tres siglos después de la venida de Cristo. La crucifixión y la muerte de Jesús en la cruz confirieron un nuevo significado al uso de la cruz en el cristianismo. Antes de la muerte de Jesús en la cruz, la cruz se usaba en privado entre los cristianos. Su finalidad era restringida. Después del Constantino, el uso de la cruz fue reconocido como un símbolo del cristianismo.

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Uso moderno de la cruz cristiana

Hoy día, el uso de la cruz como símbolo cristiano se practica universalmente. Las iglesias, tanto católicas como protestantes, tienen cruces colocadas, talladas o dibujadas en las puertas, ventanas, techos y paredes de los edificios de sus iglesias. Muchos cristianos de todo el mundo llevan la cruz en sus collares, pulseras, anillos, prendas de vestir y llaveros. Además, muchos cristianos, especialmente los católicos, hacen la señal de la cruz durante la adoración. Al hacer la señal, las personas se tocan la frente, el pecho y luego cada hombro. Muchos creen que el signo de la cruz es eficaz para protegerlos de los daños y ahuyentar a los espíritus malignos.